El 10% y la construcción del futuro

El proceso de discusión y aprobación del proyecto de retiro del 10% de los fondos en las AFP – histórica medida que logró más de 1,8 millones de solicitudes a horas de su puesta marcha – demostró cómo el sistema se da maña para lograr lo que la gente mayoritariamente reclama con mucha fuerza: 1) se puede modificar la Constitución por vías que parecieran ser novedosas 2) no es necesario seguir la recomendación de la mayoría de los expertos. Lo primero, porque es de extrema urgencia y hay una mayoría que lo apoya, por lo que estamos dispuestos a no buscar los “peros” y “hacer la vista gorda”. Lo segundo, puesto que la gente está mirando más allá de la situación puntual de este momento y asumiendo que, dado que el sistema no está entregando los resultados requeridos, debiese cambiar. Es más, estoy seguro que muchas de las celebraciones por la aprobación del proyecto son también porque lo interpretan como el principio del fin de las AFP. Sin duda, la gente está mirando a largo plazo y actuando para construir el futuro hoy.

Lo que este proyecto está haciendo, finalmente, es poner en evidencia la necesidad de modificar nuestro sistema de pensiones haciéndolo menos regresivo, más solidario y con un importante componente de reparto. Porque tal como lo dijo el ministro de Hacienda, Ignacio Briones, debemos “dejar de hacernos los lesos con respecto al problema estructural”.

Aquí el desafío real para los técnicos no es este proyecto del 10%, sino convencer a la gente que lo importante hacia adelante es cambiar el sistema de pensiones incorporando mayor reparto y pensiones mínimas dignas, pero no terminar con las AFPs. Estas últimas hacen un aporte al sistema como expertos en la gestión de fondos, pero es necesario revisar su regulación y generar mayores aportes solidarios que además sirvan para financiar las pensiones de quienes tuvieron menos oportunidades en su vida laboral. A ello podría sumarle la eliminación del tope para la renta imponible y todo lo que se cotice sobre el tope actual que vaya a fondo solidario, lo que generaría que un porcentaje menor de la recaudación actual de impuestos de segunda categoría se vaya a financiar pensiones solidarias.

La mirada sistémica, que estudia todas las partes de un todo para definir cuál es la mejor manera de responder o solucionar un problema y la visión de largo plazo, crean una diferencia ganadora en las estrategias.

Ignacio Cruz, director Symnetics

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