En los últimos años, la industria minera ha experimentado una transformación profunda impulsada por la inteligencia artificial (IA), que no sólo redefine los procesos operativos, sino también el papel de las personas en el sector. Esta evolución plantea desafíos y oportunidades para los trabajadores, quienes deben adaptarse a un entorno cada vez más digitalizado y automatizado.
Tradicionalmente, la IA ha estado vinculada con la automatización de tareas técnicas. No obstante, su impacto en la minería va mucho más allá, alcanzando áreas estratégicas como la seguridad, la planificación minera, el abastecimiento y la gestión de proyectos y talento humano. Por ejemplo, herramientas de análisis predictivo permiten anticipar fallos en equipos, mejorando la seguridad y reduciendo tiempos de inactividad. Asimismo, la IA facilita la optimización de la cadena de suministro y fortalece la toma de decisiones basada en datos, elevando así la eficiencia operativa.
Ejemplo de esto es el caso de éxito en la región de Cajamarca (Perú), presentado por el CEO de Geomatic World, Santiago Mayor, en la segunda jornada de proEXPLO 2025. El ejecutivo explicó cómo la inteligencia artificial se utilizó para optimizar los trabajos de exploración minera y que, gracias a estas herramientas, fue posible descubrir yacimientos con una significativa reducción en tiempo y recursos invertidos.
Sin embargo, la incorporación de la IA en la minería no implica necesariamente una disminución de empleo, sino una transformación de los perfiles laborales. Según un informe del World Economic Forum, el 59% de las empresas mineras enfrentan dificultades para encontrar talento con las habilidades necesarias para desenvolverse en un entorno digital. Este escenario resalta la urgencia de implementar programas de formación que preparen a los trabajadores para desempeñar nuevos roles, enfocados en análisis de datos, programación y gestión de tecnologías emergentes. Para nuestro gerente de Negocio de Minería, Samuel Toro, «la transformación digital no es solo un desafío tecnológico, es principalmente un desafío humano. La minería que queremos construir en Chile requiere poner a las personas al centro: re-entrenarlas, inspirarlas y conectarlas con un propósito mayor. La IA debe ser una aliada del talento, no su reemplazo. Ahí está el verdadero diferencial competitivo.»
Adicionalmente, la adopción de inteligencia artificial aplicada a la minería plantea desafíos organizacionales, como la necesidad de establecer estrategias sólidas de ciberseguridad y planes de contingencia que garanticen una transición segura y eficiente hacia operaciones más tecnológicas. De acuerdo con estimaciones de GlobalData y Grand View Research, se prevé que este sector crezca a una tasa promedio anual superior al 35% hasta 2030. Es así como esta proyección refleja la creciente aceptación de la IA como una herramienta estratégica para mejorar la productividad, la sostenibilidad y la seguridad en la industria.
Para Guillermo Cavalli, Gerente Corporativo de Mantenimiento de Codelco, «la llegada de la inteligencia artificial ha transformado profundamente nuestra forma de operar, especialmente en el ámbito del mantenimiento, donde hoy contamos con una capacidad sin precedentes para analizar datos y establecer correlaciones entre variables complejas. Pero, junto con impulsar el desarrollo de soluciones basadas en IA, este avance nos plantea una gran responsabilidad: asegurar la confiabilidad del dato”.
Es innegable que la inteligencia artificial está redefiniendo la minería, marcando el inicio de una nueva era, caracterizada por la eficiencia y la sostenibilidad. Para aprovechar plenamente estas oportunidades, las empresas mineras deben invertir decididamente en el desarrollo de su capital humano, fomentando una cultura de aprendizaje continuo y adaptación al cambio. Solo así podrán asegurar una transición exitosa hacia una minería moderna, en la que la tecnología y el talento humano coexistan y se potencien mutuamente. En este nuevo escenario, la automatización deja de ser una opción y pasa a convertirse en una necesidad estratégica.
